"Ir y quedarse, y con quedar partirse"
Lope de Vega
A Don Juan Antonio González
Esta voz triste que ahora se me apaga
marchita y solitaria queda helada,
cuando con la muerte el alma es llevada
y en la tierra se funde como daga.
El constante quejido que me llaga
se queda entre la mano amortajada
que de vida y de luz fuera rociada
hasta el día que mece como orzaga.
Me arrancaron esta vida a jirones
cuando quise ver sol de madrugada
y mi tormenta respondió con nones.
Cuando parece que no queda nada
y la vida se va entre dos terrones:
1 comentario:
La verdad es que me gusta bastante, el primer terceto especialmente, en segundo cuarteto el que menos. A seguir dándole!
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